Cetelem baja el interés de sus préstamos

A fin de cuentas, el banco nos deja el dinero y es a quién tiene que preocuparle que seamos fiables, no al revés. Si hemos solicitado algún crédito con una entidad, y con esta también tenemos una deuda por una cantidad más elevada, aunque sea por otro producto como una tarjeta, vamos a figurar en este archivo. Es un medio de pago con el que abonar compras por Internet y enviar y recibir dinero. Ya puedes disponer de tu dinero de manera fácil, segura y 100% transparente. Estos préstamos a diferencia de los bancarios no tienen como fin la compra de un inmueble, sino que más bien se usan para casos en donde el cliente no encuentra la posibilidad de acceder al sistema financiero o simplemente busca rapidez y comodidad en la gestión.

Si nunca has solicitado ningún crédito no estas reportada en centrales de riesgo como Datacrédito, y esto es muy bueno ya que tendrás algunas opciones. Como ya hemos dicho la mayoría de estas operaciones se hacen mediante préstamo hipotecario, cualquier otra cosa que no sea esto es entorpecer la viabilidad de la gestión. En tu caso, te recomendamos abrir una cuenta en un banco fintech, sin comisiones y sin requisitos de apertura bancos como N26 o Revolut te ofrecen una tarjeta de débito o prepago con la que podrás retirar dinero en cualquier cajero dentro de la zona Euro. Pero, ¿cuántas veces nos paramos a pensar el periodo en el que tendremos inmovilizado nuestro dinero?. Algo parecido a lo que ocurre con ING, que opera en España desde hace más de 20 años y en el que el dinero está cubierto por el FGD holandés. Igualmente, es posible que la tarjeta deba pertenecer a la entidad para poder realizar la recarga, ya que deberás identificarte como usuario para que te aparezca la opción de recargar la tarjeta y esto solo sería posible si la tarjeta de débito o crédito es del Santander.